Elecciones Disputadas

La idea de la supuesta popularidad del presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad se ha desvanecido como instantánea a orillas de un fósforo. No queda nada. O sólo los vestigios de lo que realmente pasó. El mundo lo ha visto y aunque disputadas las elecciones enseñaron lo que el pueblo iraní busca y desea en estos tiempos, ahora mismo. El presidente iraní ha sido el maestro de ceremonias de un voto fraudulento y ha demostrado que su deseo de perpetuarse en el poder lo recoloca en la silla de los dictadores. Es repudiado por antiguos seguidores y muchos nuevos iraníes que ya no creen en sus promesas y apoyan al reformista Mousavi.Los iraníes quieren una nueva vida de aperturas de todo tipo y reformas. Ahmadinejad sabe que las protestas masivas claman un recuento de los votos o piden comenzar todo de nuevo,en otras palabras transparencia! Este dictador del Medio Oriente comparado al Chávez del Tercer Mundo (y hoy pido permiso para no mencionar al maestro de este último pues creo que merece que su nombre deje de aparecer en titulares y reflexiones de vez en cuando)que niega la existencia del Holocausto apoya todo tipo de barbarie que se cometa en este mundo moderno, los nexos se huelen en el aire. El presidente iraní le ha fallado a su pueblo, y por cada proyecto que concluyó no hubo realmente uso, o sea que cada hospital o edificio construido quedó sólo como eso una estructura arquitectónica más y sus discursos de poderío militar me recuerdan a otro amigo del Norte, Korea del Norte que ya está dando mucho de qué hablar y es que toda esta gente está tan insana de tanto culto a la personalidad que no sólo en Cuba sino en todo el planeta siguen dañando tanto a la humanidad. pero volviendo a la reflexión de hoy contenta estoy de que Mousavi va a dar guerra y organizará más protestas para exigir un recuento. Esperemos ver cómo termina y ojalá no tenga que repetirme ésta vez el estribillo de una canción de salsa que dice: Ten cuidado que el Diablo anda suelto!